Si tu equipo no sabe cuánto cobra el de al lado… ya empezaste perdiendo.

El CEO que puso los sueldos sobre la mesa (literalmente)

Joel Gascoigne, fundador y CEO de Buffer, decidió hacer lo impensable.

Publicó cuánto gana cada persona del equipo.

Y no solo eso.

Explicó cómo se calcula cada sueldo.

Todo está en una hoja pública, abierta para quien quiera verla:

https://buffer.com/salaries

Cualquier lobo —o cordero curioso— puede entrar y ver:

Cuánto gana el CTO.

Cuánto gana la última persona contratada.

Qué factores se tienen en cuenta (ciudad, rol, experiencia, etc.).

Una jugada arriesgada.
Pero brillante.

Porque mientras otros líderes se esconden detrás de “políticas internas”, Gascoigne lo puso todo sobre la mesa.

Y con eso, desarmó de una patada una de las bombas más peligrosas en cualquier equipo: la percepción de injusticia.

¿Por qué esto revienta cabezas?

Porque te enfrenta a una verdad que la mayoría prefiere no mirar:

Si no podés justificar lo que paga tu empresa… probablemente estés disfrazando favoritismos de decisiones estratégicas.

Y eso se huele.
Los empleados lo sienten.
Y cuando lo sienten, se van.
O peor: se quedan… pero apagan el chip.

La transparencia salarial no es una moda woke.

Es una declaración de guerra al “juego político” que arruina empresas desde adentro.

La cuestión es esta: La falta de transparencia no es una omisión. Es una traición silenciosa.

¿Y si hicieras lo mismo?
¿Te animarías a publicar cuánto gana cada persona de tu equipo?

Si la respuesta es no, ¿por qué?

Porque no están alineados los criterios.
Porque no querés que el cliente vea cuánto te queda.
Porque alguien cobra más de lo que vale… y lo sabés.

Ahí tenés el diagnóstico. No necesitás consultores.

Solo tenés que responder con honestidad esa pregunta y después mirar lo que duele.

Porque esto no va de sueldos. Va de cultura.

Para llevarte ahora (aunque no lideres un equipo aún):

  • No ocultes decisiones bajo el paraguas del “criterio gerencial”.
  • Si no podés explicar por qué alguien gana lo que gana, revisá el sistema.
  • La transparencia incomoda… pero te vuelve invulnerable.
  • Ser lobo también es tenerlas bien puestas para mostrar los colmillos sin miedo.
  • La manada necesita confianza, no solo sueldo a fin de mes.

Como miembro de la manada cada vez que publico algo importante te llega un email.

No siempre. Sólo lanzo el Newsletter cuando hay algo que valga la pena de verdad: acceso a historias reales como ésta que no vas a leer en LinkedIn

Cosas que me pasaron de verdad, cagadas que me mandé, aprendizajes que me dolieron…

Y sobre todo: artículos sobre cómo puedes usar todo eso para facturar mejor y dejar de ser un cordero más en el mercado.

Y, como siempre, contenido exclusivo, sin filtros que, a veces, muerde.