Hace un par de días publiqué un artículo crudo sobre por qué las gafas inteligentes de Meta y compañía están condenadas antes de nacer.
Pero lo más valioso de ese artículo no es la crítica a Silicon Valley.
Es el espejo que te deja si estás creando, vendiendo o lanzando algo ahora mismo.
Porque los errores que matan a Meta también matan emprendimientos como el tuyo.
Solo que sin titulares ni salvavidas de 12.000 millones.
Hoy vamos con eso.
Con los 3 errores mortales que matan ideas prometedoras y cómo vos podés esquivarlos con cabeza de lobo.
Error #1: Resolver un problema que no existe
Meta creyó que grabar con las gafas era una necesidad urgente.
No lo era.
La gente no quiere andar filmando con los ojos. Punto.
Vos hacés lo mismo cuando:
- Llenás tu producto de funciones que a nadie le duelen.
- Creás un curso sin tener claro qué problema real resuelve.
- Lanzas una herramienta solo porque “es innovadora”.
¿Cómo evitarlo?
Preguntá primero:
¿Qué haría que alguien pague por esto?
Si no hay respuesta inmediata y fuerte… aún no tenés producto.
Error #2: Ignorar el contexto humano
No alcanza con que funcione.
Tiene que encajar.
Tecnologías como Google Glass fallaron porque rompían el contrato social.
Ejemplos:
- Apps de productividad que generan culpa en lugar de alivio.
- Productos que requieren hábitos nuevos sin justificar el esfuerzo.
- Herramientas de venta que hacen que tus clientes se sientan espiados.
¿Cómo evitarlo?
Antes de lanzar, preguntate:
¿Esto encaja con la vida real de mi cliente o lo pone incómodo?
No vendas soluciones que generan más fricción que alivio.
Error #3: Asumir que si vos lo amás, el mercado también
Este es el pecado capital del emprendedor entusiasta.
Estás tan enamorado de tu idea, que te olvidás de validarla con gente que no te quiere.
Yo lo llamo “testeo con odio”.
Poné tu producto frente a un desconocido.
Escuchá las críticas. Callate la boca.
Si sobrevive… ahí empieza el trabajo real.
Bonus: 3 Preguntas para detectar si estás por matar tu idea
- ¿Resolver esto vale dinero para alguien o solo es “lindo”?
- ¿Es al menos 10 veces mejor que lo que ya usan?
- ¿La gente se lo recomendaría a alguien sin que yo lo pida?
Si la respuesta a alguna es “no”…
no estás listo para lanzar.
Estás listo para ajustar.
Más vale afilar el cuchillo que apurarse a cortar
La mayoría de los productos no mueren por falta de marketing.
Mueren antes.
En la mesa de diseño.
En la validación floja.
En la falta de coraje para decir: todavía no lo tengo.
Vos no viniste a esta manada para repetir errores de cordero.
Viniste a detectar lo que no funciona… antes de apostar tu alma (y tu plata).
Nos vemos en la próxima lección.
Y si este artículo mató tu idea...
¡BIEN!
Esa era la intención.
Prevenir para no andar llorando después.